“Luchar contra la inflación es enfrentar a la pobreza”: AMLO
El presidente Andrés Manuel López Obrador ayer durante el evento “Jornadas de producción para el autoconsumo, zona norte”, realizado en el Instituto Tecnológico de Nuevo León, en Monterrey.
Boca del Río, Ver. Al continuar con su recorrido por el país para reunirse con productores, agrónomos y especialistas en el campo para incrementar la producción de alimentos básicos y enfrentar la carestía, el presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que “luchar contra la inflación es enfrentar a la pobreza, es garantizar que el ingreso le rinda más a la gente, fortalecer el poder de compra de nuestro pueblo. Para eso es la lucha contra la inflación”.
Ante miles de productores congregados en el World Trade Center, el mandatario equiparó la manera como en unidad se enfrentaron los efectos de la pandemia, con lo que ahora se pretende lanzar para acometer el incremento de precios derivado de la inestabilidad mundial asociada a la invasión de Rusia a Ucrania. Un fenómeno que, al igual que la pandemia, tiene un origen externo pero el país debe adoptar acciones para evitar su impacto en los sectores más pobres del país.
En este marco, el mandatario lanzó una crítica a la conducción de los políticos más influyentes y los organismos internacionales: “tienen tache”. Consideró que no hicieron lo suficiente para impedir la guerra que ahora tiene estas consecuencias, porque las gestiones de la Organización de las Naciones Unidas para detener la guerra.
Una hora de discurso donde realizó un recorrido sobre las acciones de su administración para fortalecer el sector productivo, con especial énfasis en las medidas adoptadas para recuperar el sector energético que los tecnócratas neoliberales, dijo, abandonaron. Su administración apostó por la recuperación del sector energético mediante la recuperación de las refinerías y la adquisición de otra en Texas, que en su construcción fue una coinversión de Shell y Pemex.
En este marco, reiteró que se ha recuperado la producción y para el próximo año ya no habrá más importación de combustibles porque se llegó al grado en el periodo neoliberal de vender petróleo y comprar gasolina, “vender naranja y comprar jugo de naranja”.
Por ello, dijo, de 7.7 por ciento de inflación en México, el impacto de los combustibles sólo es de 0.6 por ciento, en contraste con Estados Unidos que es de 2.1, pero el problema en el país es el incremento en el precio de los alimentos que representa 3.6 por ciento de la inflación.
“Necesitamos enfrentar este asunto, se está hablando con productores, comerciantes, los grandes distribuidores de alimentos. Se logró que no aumenten los precios de una canasta básica que se va a poder comprar a un precio justo maíz, frijol, arroz, azúcar, atún, sardina. 24 productos van a estar con precios justos. No voy a usar el término de control de precios, no, porque lo logramos de manera voluntaria”.
Mencionó que las principales cadenas de distribución como Walmart, Chedraui y Soriana se han adherido al esfuerzo para mantener precios bajos en productos básicos. Lo hicieron de manera voluntaria porque ellos asumen que quien compra esos productos llevan otras mercancías que les permite recuperar sus utilidades.
Boca del Río, Ver. Al continuar con su recorrido por el país para reunirse con productores, agrónomos y especialistas en el campo para incrementar la producción de alimentos básicos y enfrentar la carestía, el presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que “luchar contra la inflación es enfrentar a la pobreza, es garantizar que el ingreso le rinda más a la gente, fortalecer el poder de compra de nuestro pueblo. Para eso es la lucha contra la inflación”.
Ante miles de productores congregados en el World Trade Center, el mandatario equiparó la manera como en unidad se enfrentaron los efectos de la pandemia, con lo que ahora se pretende lanzar para acometer el incremento de precios derivado de la inestabilidad mundial asociada a la invasión de Rusia a Ucrania. Un fenómeno que, al igual que la pandemia, tiene un origen externo pero el país debe adoptar acciones para evitar su impacto en los sectores más pobres del país.
En este marco, el mandatario lanzó una crítica a la conducción de los políticos más influyentes y los organismos internacionales: “tienen tache”. Consideró que no hicieron lo suficiente para impedir la guerra que ahora tiene estas consecuencias, porque las gestiones de la Organización de las Naciones Unidas para detener la guerra.
Una hora de discurso donde realizó un recorrido sobre las acciones de su administración para fortalecer el sector productivo, con especial énfasis en las medidas adoptadas para recuperar el sector energético que los tecnócratas neoliberales, dijo, abandonaron. Su administración apostó por la recuperación del sector energético mediante la recuperación de las refinerías y la adquisición de otra en Texas, que en su construcción fue una coinversión de Shell y Pemex.
En este marco, reiteró que se ha recuperado la producción y para el próximo año ya no habrá más importación de combustibles porque se llegó al grado en el periodo neoliberal de vender petróleo y comprar gasolina, “vender naranja y comprar jugo de naranja”.
Por ello, dijo, de 7.7 por ciento de inflación en México, el impacto de los combustibles sólo es de 0.6 por ciento, en contraste con Estados Unidos que es de 2.1, pero el problema en el país es el incremento en el precio de los alimentos que representa 3.6 por ciento de la inflación.
“Necesitamos enfrentar este asunto, se está hablando con productores, comerciantes, los grandes distribuidores de alimentos. Se logró que no aumenten los precios de una canasta básica que se va a poder comprar a un precio justo maíz, frijol, arroz, azúcar, atún, sardina. 24 productos van a estar con precios justos. No voy a usar el término de control de precios, no, porque lo logramos de manera voluntaria”.
Mencionó que las principales cadenas de distribución como Walmart, Chedraui y Soriana se han adherido al esfuerzo para mantener precios bajos en productos básicos. Lo hicieron de manera voluntaria porque ellos asumen que quien compra esos productos llevan otras mercancías que les permite recuperar sus utilidades.
Y en este marco, López Obrador resaltó el papel de los productores del campo: “Se nos vino este problema de la inflación y ¿cómo le hacemos si no estuviesen ustedes trabajando allá abajo?
“¿Iban ustedes a estar ahí si hubiese ganado otro partido?”
—Nooo
—¿Estaría Sembrando vida, Producción para el Bienestar, los precios de garantía?
—Nooo, respondió.
“Claro que no. Cuando andábamos en la campaña dije que quería que los agrónomos que ahora están laborando honestamente, buscándose la vida como choferes, quiero que vuelvan al campo a trabajar en su profesión y estamos cumpliendo, como técnicos, agrónomos, extensionistas”.
En su análisis sobre los factores inflacionarios, aludió al incremento en 10 veces del costo de los fletes internacionales para traer los productos. Destacó que como medida coyuntural, en tanto México no logre la autosuficiencia alimentaria, se eliminarán los aranceles (impuestos, les dijo) a la importación de productos básicos.
Tras condenar el abandono al sector rural en los tiempos del neoliberalismo, López Obrador llamó a reforzar el sistema de producción de autoconsumo de alimentos básicos como maíz, frijol, arroz para tener el suministro de lo elemental con los productores del campo.
Ofreció que desde la parte gubernamental se buscará apoyar la producción agrícola mediante el suministro de fertilizantes a partir de la recuperación de plantas que fueron parte de una trama de corrupción, pero que ahora se están rehabilitando. Mencionó que el programa de entrega de fertilizantes en Guerrero, el cual se amplió a Oaxaca, Puebla, Tlaxcala y se proyecta llevar a Chiapas, Campeche Tabasco, Zacatecas, Nayarit y Veracruz.