Gobiernos anteriores eran vendedores de bienes de la Nación: AMLO
El presidente López Obrador declaró este jueves que todavía no ha terminado de morir lo viejo y no ha terminado de nacer lo nuevo, pero visualiza que en 2024 se mantendrá Morena en la Presidencia.
El presidente Andrés Manuel López Obrador volvió a hacer uso de su conferencia de prensa matutina para arremeter contra lo que él llama sus “adversarios los conservadores”.
En esta ocasión, el primer mandatario criticó que en administraciones anteriores “eran vendedores de bienes de la Nación a particulares o extranjeros”.
La función principal de gobiernos anteriores, dijo el presidente este jueves, “era entregar bienes nacionales, eran vendedores de bienes de la Nación a particulares nacionales o extranjeros, esa era la función principal del gobierno”.
Por ello, dijo, los funcionarios de más alto rango no se preocupaban por los empleados operativos del gobierno de menor nivel.
“Qué les iba a preocupar que estuviese cerrada la refinería de Ciudad Madero, Tamaulipas, esto fue creando una indolencia, una apatía [en los trabajadores]. Cuando se les convoca a que juntos rescatemos Pemex, que salgamos adelante como país, ahora están aplicados por entero, lo mismo pasa con los médicos, los maestros y maestras”, dijo López Obrador.
“Acabo de estar en Tamaulipas y había un desánimo tremendo en los trabajadores de la refinería de Ciudad Madero porque estaba cerrada, la refinería, como a los de arriba no les importaba porque estaban metidos en los negocios, era el negocio principal que tenían los gobiernos, eran entregar bienes nacionales”, cargó el mandatario.
López Obrador apuntó que “el principal problema de México era la corrupción”, y aunque reconoció que “sí continúa habiendo corrupción”, ya no es lo mismo.
“Antes el gobierno estaba orientado por completo a el saqueo y a la corrupción. Decía Tolstoi que un Estado que no procura el bienestar del pueblo no es más que una banda de malhechores, y así estábamos”, consideró.
“Sigue habiendo estas injusticias, pero ya la corrupción es delito grave, que no lo era, ya no se condonan impuestos. Estamos hablando de 200,000 o 300,000 millones al año de condonación de impuestos. Los de arriba no pagaban impuestos, me canso de decirlo porque además puedo probarlo, las grandes empresas, los bancos, no pagaban impuestos, y si pagaban se los devolvían. Todo eso ya no existe”, dijo.
También habló del combate a robo de combustible. Datos presentados durante su conferencia de este jueves indican que en diciembre de 2018 se robaban 72,000 barriles diarios de combustible, cifra que bajó a 5,200 barriles diarios en septiembre de este año. Esto ha representado un ahorro de 231,000 millones de pesos.
“Nos ayudó el pueblo, hubo bloqueos, nos destruyeron ductos, tuvimos que recurrir a la compra de más de 600 pipas para transportar gasolina porque no lo podíamos hacer por los ductos. La gente nos ayudó porque aguantó, porque la mafia que dominaba esto pensaba que no íbamos a resistir por el desabasto de gasolina y resistimos”, enfatizó.
El presidente refirió que este proceso de combate a la corrupción ha enfadado a sus opositores. “Están con mucho coraje y se obnubilan y han desatado campañas de desprestigio, guerras sucias, cuando no es el plan del señor X, es el plan chachalaca, o el plan Guacamaya, o el plan zopilote, o el Pejeleak y no les ha funcionado nada”.
No obstante, reconoció que todavía hay pendientes, pero se dijo contento porque visualiza que en 2024 la Presidencia se mantendrá en Morena.
“Hay relevo a la vista”, dijo.
“Todavía no ha terminado de morir lo viejo y no ha terminado de nacer lo nuevo. Estamos sentando las bases, estoy seguro que voy a entregar la estafeta a quienes van a continuar, estoy seguro de eso, eso me tiene muy contento porque no va a haber marcha atrás. Ya no van a regresar los corruptos”, agregó.