Vuelve la pelea por las marcas Fórmula 1 y F1 en México
Desde 2018, Bardahl de México sostiene con Formula One Licensing BV una pelea en tribunales mexicanos sobre las marcas famosas las marcas Formula 1 y F1.
“Sólo pedimos que se respete el uso exclusivo de la marca para las categorías de aceites lubricantes y aditivos de las que es titular la compañía Bardahl”, dijo Oscar de la Torre Jara, socio director de la firma de abogados De la Torre, Rodríguez y Salazar y representante de la empresa mexicana.
El abogado aseguró que algunas de las escuderías participantes en el Gran Premio de la Ciudad de México estarán violando los derechos de marca de las marcas Fórmula 1 y F1, propiedad de la empresa Bardahl.
El abogado enfatizó que las marcas F1 y Fórmula 1 fueron registradas en México desde 1979 por Bardhal para la comercialización de aceites lubricantes y aditivos, por lo que deben de llenar de orgullo a todos los mexicanos.
“Años después, el Gran Premio tomó el nombre de Fórmula 1 para nominar su competencia automovilística a nivel mundial, y obtuvo el registro 749056 otorgado en BENELUX el 19 de enero de 2004 para dicha competencia”, expresó Oscar de la Torre Jara, quien comenzó a pelearle la propiedad de las marcas en 2018.
México, durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, se adjudicó las ediciones de Fórmula 1 Gran Premio de México para los años 2015, 2016 y 2017, lo cual buscaba quitar de la mente de los turistas extranjeros la imagen de inseguridad de la Ciudad de México.
“Es falso que la empresa Bardahl de México sea titular de las marcas Fórmula 1 y F1 en su forma denominativa y mixta de manera general”, afirmó Georgina Esteva Wurts, representante de Formula One Licensing B.V.
La representante de la empresa holandesa Bardahl de México pretende hacerle creer al Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), que es la creadora de las marcas Fórmula 1 y F1, así como que es el titular absoluto de las mismas, es decir, que posee registros dentro de cualquier –o todas– las clases de productos y servicios.
“No es Bardahl de México la empresa detrás de estas marcas, tampoco es la titular absoluta de los registros que para estos signos se han concedido en México”, explicó Esteva Wurts.
Las marcas de Bardahl de México fueron obtenidos de manera ilegal y aprovechándose del prestigio del serial automovilístico más grande de la historia: “Las marcas F1 y Fórmula 1 fueron concebidas desde hace casi 7 décadas”, señaló la representante de Formula One Licensing B.V.
La Fédération Internationale de L’Automobile fue fundada en 1904 y es una federación internacional sin fines de lucro que representa los intereses de organizaciones de automovilismo alrededor del mundo.
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Comprende 228 clubes nacionales de automovilismo, asociaciones de automovilismo, clubes turísticos y federaciones nacionales de automovilismo en 133 países. En el caso de México, se trata de la Organización del Deporte Automovilístico Internacional (OMDAI).
La Fédération Internationale de L’Automobile, es la propietaria del Campeonato Mundial de Fórmula 1 desde 1950, ya que posee el marco de regulaciones aplicables del evento.
“Esta Federación actualmente no tiene un interés directo en la explotación comercial del Campeonato”, comentó Georgina Esteva Wurts.
“Las marcas F1 y Fórmula 1 se han utilizado desde 1950 de forma constante para designar no sólo a las carreras de autos del Campeonato Mundial de Formula 1, sino a la organización, transmisión, mercadeo, artículos promocionales de las carreras y toda actividad y productos”, expuso la representante de Formula One Licensing B.V.
“Las marcas F1 y Fórmula 1 corresponden a un serial automovilístico que desde al menos el año 1950 ha venido año con año realizándose a nivel mundial siendo que la primera carrera celebrada en México data de 1962 en donde Jim Clark ganó la competencia que en ese entonces no concedía puntos para el Campeonato de Pilotos de Fórmula 1”.
“En 1963, el mismo Jim Clark con la escudería Lotus-Climax se adjudicó el primer Gran Premio de México de Fórmula 1 que otorgó puntos para el Campeonato de Pilotos de Fórmula 1”, recordó la representante de Formula One Licensing B.V.
“Las marcas F1 y Fórmula 1 vienen usándose en México desde 1962, esto es más de 15 años antes de la fecha legal de la primer marca que para Fórmula 1 solicitara ventajosa e ilegalmente Bardahl de México, siendo muy puntuales en el hecho de que las competencias del serial más famoso y prestigiado del mundo no han dejado de celebrarse desde 1950 en todo el mundo”, dijo Georgina Esteva Wurts.
El inicio de la Fórmula 1 moderna se remonta 1950, cuando participaron escuderías como Ferrari, Alfa Romeo y Maserati. En México, el Campeonato Mundial de Fórmula 1 se remonta al año de 1962, cuando se celebró una carrera que no otorgaba puntos para 15 el campeonato, siendo que el año siguiente, 1963, se llevó a cabo la primera carrera oficial.
Un año después México apareció en el calendario como Evento por los siguientes ocho años, hasta 1970. El Campeonato regresó a México en 1986, año en que se realizó una carrera en el remodelado y renombrado Autódromo Hermanos Rodríguez en honor a Ricardo y su hermano, Pedro, quien también murió trágicamente mientras participaba en una carrera en Alemania en 1971.
En el Autódromo Hermanos Rodríguez se realizó el Campeonato de Fórmula 1 hasta 1992.
“A partir de 1996 y de acuerdo con varios contratos con la Fédération Internationale de L’Automobile, todos y cada uno de los derechos comerciales y de propiedad intelectual pertenecientes al Campeonato se han otorgado en exclusiva a compañías pertenecientes a las Empresas Formula 1”, expuso Georgina Esteva Wurts.
En 2014 se anunció oficialmente que México recibiría una vez más un evento del Campeonato. El Promotor firmó un contrato de cinco años con FOWC, con el primer Evento realizándose en el 2015, en el Autódromo Hermanos Rodríguez.
Fórmula 1 quita percepción de inseguridad a la Ciudad de México
La estrategia del expresidente Enrique Peña Nieto de traer el Gran Premio Fórmula 1 fue para sacar de la mente de los viajeros estadounidenses, canadienses y europeos que la Ciudad de México no es insegura, sucia ni tampoco está inundada por las drogas ni delincuencia.
“Este posicionamiento (de Gran Premio Formula 1) contrarresta la percepción que desde muchos años tiene el turista internacional sobre la Ciudad de México, como una urbe inseguridad y no higiénica”, revela el Consejo de Promoción Turística de México (CPTM), organismo encargado de cabildear el regreso de uno de los eventos deportivos de mayor impacto en el mundo y desaparecido por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Una investigación de la empresa Publicis España Comunicación, que fue encargada por el CPTM para convencer a los responsables de la agenda de turismo de la anterior administración de Peña Nieto, expone que la percepción de la Ciudad de México entre los turistas de Reino Unido, Rusia, Alemania, Francia, Italia y España es de riesgo, contaminación, sobrepoblación, ruda y violenta.
“La Ciudad de México impulsa señales de imágenes negativas tales como: aburrida, carente de interés, principalmente es asociada con peligro y drogas, así como perciben una doble imagen del destino por un lado la asocian a una lugar único y atractivo, sin embargo la identifican como ciudad grande y ruidosa”, dice el documento del desaparecido CPTM.
Los viajeros extranjeros también ven a la capital del país con altos índices de delincuencia, secuestros, corrupción y no ofrece elementos o eventos inesperados, nuevos o considerados suficientemente atractivos, expone el CPTM en un análisis de los beneficios del premio entregados al gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Rodolfo López Negrete Coppel, ex director del CPTM, pidió el 13 de junio de 2014 la autorización de 213 millones 279 mil dólares para pagar los derechos del Fórmula 1 a Corporación Interamericana de Entretenimiento (CIE).
El ex funcionario cabildeó el regreso del evento deportivo con CIE, quien cuenta con el uso, aprovechamiento y explotación exclusiva del Autódromo Hermanos Rodríguez, así como posee la relación comercial con la empresa Formula One World Championship Limited para traer el evento a México.
López Negrete decidió contratar con CIE la realización y ejecución del Fórmula 1 Gran Premio de México en cada uno de los años 2015 al 2019.
El 1 de marzo de 2019, el gobierno federal perdió el derecho preferencial en la Formula 1 para el Gran Premio de 2020.