Con la ayuda de la SCJN, el “Bronco” vence al Congreso de NL

El máximo tribunal de la nación determina que el Congreso no lo puede sancionar

El gobernador de Nuevo León interpuso recurso en contra del órgano legislativo local, que busca sancionarlo por uso de recursos públicos en su candidatura presidencial

 

Exansión Política

La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) invalidó al Congreso de Nuevo León para sancionar al gobernador Jaime Rodríguez Calderón, ‘el Bronco’ por el caso de las “broncofirmas”.

Durante una sesión virtual, la Suprema Corte declaró inconstitucionales las reglas procesales que fueron creadas por el Congreso local para sancionar a Rodríguez por medio de la destitución e inhabilitación por seis años para cargos públicos, por el delito de desvío de recursos públicos tras usar personal del gobierno para alcanzar las firmas que respaldarían su candidatura presidencial en 2018.

Las reglas procesales fueron desechadas con 3 votos a favor y dos en contra.

En el proyecto del ministro Juan Luis González Alcántara se argumentó que el Congreso local no es un Poder superior al Ejecutivo, por lo que no corresponde a los diputados locales sancionar al gobernador.

“Es procedente y fundada la presente controversia constitucional, se declara la invalidez del acuerdo impugnado”, dijo González Alcántara al leer la propuesta.

González Alcántara comentó que el proyecto de la sanción seguirá “vivo”, al ordenarle al Congreso de Nuevo León que analice con qué ley existente se puede sancionar al ‘Bronco’, para cumplir con la sentencia también a ordenanza del Tribunal Electoral del Poder Judicial Federal.

Al respecto, el senador de Movimiento Ciudadano, Samuel García, lamentó la resolución de la SCJN.

García, quien promovió la denuncia contra el gobernador de Nuevo León por el delito de desvío de recursos públicos, acusó a la SCJN de “blindar” al mandatario.

“La Suprema Corte blinda al Bronco, dejan sanción en un limbo, y no dan ruta de castigo contra las ‘broncofirmas’”, dijo.

“No dicen ni qué, ni cómo, ni cuándo, ni nada, simplemente que el Tribunal Electoral haga valer sus sentencias”.

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