Este es el plan de los empresarios para reducir el impacto del coronavirus

Tanto el Consejo Coordinador Empresarial como la Coparmex capitalina, propusieron diversas medidas para contrarrestar los efectos recesivos del coronavirus.

Ciudad de México, Méx., 19 Mar. 2020.– Ante el impacto de la pandemia por coronavirus en México, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) ha propuesto al gobierno federal una serie de medidas contundentes e inmediatas para evitar la disminución drástica de la inversión, apoyar a las pequeñas y medianas empresas y preservar el empleo de 21 millones de mexicanos.

El objetivo es colaborar con el gobierno para mantener la salud, la seguridad y el bienestar económico de los ciudadanos, sostuvo el CCE a través den comunicado.

En el frente internacional, sostuvieron, el daño a la economía real ya se muestra por el lado de la oferta, al interrumpirse el comercio y la actividad de diversas cadenas de producción.

En el interno, los empresarios dicen que por ahora el problema es primordialmente de demanda agregada. Por ello, las medidas deben enfocarse a fortalecerla.

En este sentido, indican que las propuestas se agrupan en cinco frentes: asegurar liquidez al mercado interno; estimular el consumo privado; facilitar y estimular la inversión privada; elevar consumo e inversión del sector público; y dar señales positivas a los mercados internacionales.

Asimismo se incluyen un amplio número de medidas económicas, fiscales y administrativas que nos permitan fortalecer nuestra economía para sobrellevar la etapa de crisis.

Adicionalmente, propusieron una serie de medidas de adopción urgente y prioritaria con las que se puede comenzar a mitigar la afectación en el corto plazo:

1. Asegurar la liquidez en el mercado financiero. La prioridad es que la intermediación financiera sea fluida en el corto y en el largo plazo.

2. Mantener el esfuerzo de austeridad y disciplina en el manejo de las finanzas públicas. Sin embargo, en este momento de retos inéditos, el Gobierno debe abandonar el objetivo de lograr el 1% del PIB de superávit primario. Los recursos liberados deben ser utilizados para los apoyos a la reactivación de la economía. Si es necesario, tomar deuda de una forma responsable.

3. Fortalecer el Acuerdo de Inversión en Infraestructura entre el Sector Privado y el Gobierno y anunciar de inmediato el plan de inversiones del sector privado en el sector energético.

4. Depreciación acelerada automática. Establecer la posibilidad de efectuar la deducción inmediata de las inversiones que las empresas realicen sin limitación geográfica alguna, durante el ejercicio de 2020.

5. Preservar el empleo. En los casos en que sea inevitable el recorte de puestos de trabajo, el gobierno debería apoyar a las empresas con recursos fiscales, para que a estos trabajadores se les otorgue al menos un salario de subsistencia.

6. Respetar de forma irrestricta el Estado de Derecho, evitando las amenazas de cambios a las normas ya en operación para empresas que invirtieron en el sector eléctrico, y cambios inaceptables como consultas populares para inversiones que ya están hechas.

7. Acelerar los pagos pendientes a proveedores de CFE y Pemex. Es urgente el pago de pasivos a proveedores por productos y servicios ya entregados en cualquiera de los tres niveles de gobierno, federal, estatal o municipal.

8. Apresurar las devoluciones pendientes de IVA a las empresas y restaurar la compensación universal. Las empresas necesitan más la liquidez que el gobierno, en este momento.

9. Conformar un equipo con representación tripartita del sector privado, trabajadores y el Gobierno para analizar el impacto económico, y determinar acciones a seguir en esta crisis económica.

10. Activar programas especiales de garantías para fortalecer algunos de los sectores más afectados. El papel contracíclico histórico de la Banca de Desarrollo en situaciones de crisis ha sido fundamental para preservar la planta productiva.

Los empresarios sostienen que todas estas medidas –tanto las de corto plazo como las de mayor profundidad– ayudarán a contener los efectos económicos de la pandemia y contribuirán a conservar el empleo y a dar liquidez a personas y empresas, para crear las condiciones de recuperación del crecimiento económico.

Concluyeron remarcando que México requiere de la colaboración de todos los sectores, y la sensibilidad para tomar medidas decididas en apoyo de nuestra salud y nuestra economía. Instando finalmente a los ciudadanos a que “sólo saldremos adelante si lo hacemos entre todos”.

Coparmex CDMX propone diálogo y medidas

Por su parte, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Ciudad de México propuso diálogo y un plan para enfrentar la emergencia sanitaria por el coronavirus (COVID-19), a fin de aminorar el impacto económico sobre las empresas en esta capital.

En esta línea, Coparmex destacó que la condición de emergencia en la que nos encontramos requiere de un eficaz diálogo y, sobre todo, colaboración entre gobierno, sociedad e iniciativa privada, para poner en marcha medidas que le permitan a la capital seguir operando en su actividad económica esencial.

Por ello, propuso: Transparencia en la información. Se demanda a las autoridades sanitarias federales y de la Ciudad de México, ofrezcan información suficiente y coherente.

Además, Coparmex propuso que se instale un Comité de Emergencia de Alto Nivel que, junto con las autoridades, especialistas y ciudadanía, atienda la emergencia.

Los empresarios capitalinos piden también un plan Emergente de Apoyo a Empresas, con un paquete de ayuda e incentivos fiscales, que permita asegurar la liquidez de las mismas y preservar los empleos en este periodo de contingencia.

Para lograr ese plan de apoyo, dice que se debe extender un decreto desde el Gobierno de la Ciudad de México, con la finalidad que el Impuesto Sobre Nómina (ISN) del 3% sobre salarios, se deje de cobrar durante todo el tiempo que dure la emergencia sanitaria.

Además, demanda la suspensión del pago de otros impuestos locales, hasta dentro de 3 meses, tales como predial, agua, etc. En el caso del impuesto sobre hospedaje, no tiene caso pedir exención, si no hay huéspedes o empleados, no hay impuesto.

El plan requiere también -comentó- extender la vigencia de licencias y autorizaciones hasta por 90 días adicionales, más allá de su vigencia. Y suspender verificaciones e inspecciones administrativas. Así como diferir o eliminar temporalmente el pago de derechos por licencias de funcionamiento, construcción, etc.

Los empresarios capitalinos, incluso, dicen que se podría suspender el pago de cuotas patronales al IMSS por los días que los trabajadores no estén en la empresa, lo mismo que al Infonavit.

Finalmente, la Coparmex señaló que también debe haber un plan de salud para evitar contagios masivos, por lo que el gobierno de la ciudad debe asignar un presupuesto para atender la emergencia.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *