Yemen: mueren cinco niños en ataques de Arabia Saudí sobre Saná
Acnur-Shadi Abusneida: Faiza Ali, madre de cinco niños, explica que fue desplazada por la guerra y ahora vive con su familia en una tienda. Foto: Periodistas en Español.
Cinco niños murieron y al menos otros dieciséis resultaron heridos, además de decenas de víctimas adicionales, incluidos trabajadores del sector de la salud, durante los bombardeos aéreos registrados este jueves 17 de mayo de 2019 en Saná, la capital de Yemen, informó en Ginebra Jens Laerke, portavoz de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en inglés).
El ataque se produce apenas un día después de que la directora ejecutiva de UNICEF, Henrietta Fore, pidiese ante el Consejo de Seguridad que se redoble el apoyo a los esfuerzos de la ONU para alcanzar una solución política negociada, ya que “quince millones de niños están pidiendo que se salven sus vidas”.
Según las informaciones analizadas por la OCHA, la coalición liderada por Arabia Saudita llevó a cabo los bombardeos sobre la ciudad, controlada por los rebeldes hutíes, después de que estos reivindicaran la responsabilidad de los ataques con aviones teledirigidos contra las instalaciones petroleras saudíes.
La representante de la ONU en Yemen, Lise Grande, señaló en un comunicado que “este terrible ataque es un recordatorio de las razones por las que tiene que acabar esta guerra” y recordó que el derecho humanitario internacional “es claro” al imponer a los combatientes “hacer todo lo posible para proteger a los civiles”.
El derecho internacional es una obligación
Grande añadió que aplicar ese derecho internacional “no es una opción”, sino “una obligación legal y, ante todo, moral” para todos los implicados en el conflicto.
Desde el comienzo de la guerra hace cuatro años, 7300 menores han muerto o resultado gravemente heridos.
Cada día, otros ocho niños serán asesinados, heridos o reclutados mientras continúe la lucha entre la coalición que apoya el Gobierno de Yemen y las fuerzas rebeldes hutíes por el control del país. Además, cada diez minutos, otro niño morirá por una enfermedad que podía haberse evitado, según las estimaciones de UNICEF.
Los refugiados tampoco están a salvo
También en Ginebra, la agencia de la ONU para los refugiados hizo un llamamiento a los combatientes para que respeten la protección de los civiles y respeten sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario.
“Se sabe que los refugiados se encuentran entre los heridos y afectados”, dijo el portavoz de ACNUR Andrej Mahecic. “Una refugiada somalí y su hija están entre las que ahora reciben tratamiento crítico en un hospital”.
Agregó que hay más de 275 000 refugiados, solicitantes de asilo y migrantes en el país, y más de nueve de cada diez son del Cuerno de África.
En medio de la actual inseguridad en Yemen, millones de personas están al borde de la inanición, ya que los problemas de acceso dificultan el trabajo de las organizaciones humanitarias para entregar alimentos, combustible y medicamentos.
La mayoría de estos suministros se importan a través de los asediados puertos en el Mar Rojo de Hodeida, Salif y Ras Issa, de donde la milicia opositora hutí, también conocida como Ansar Allah, se retiró a principios de esta semana en virtud del acuerdo liderado por la ONU sellado en diciembre pasado, dijo el enviado especial, Martin Griffiths, al Consejo de Seguridad el miércoles 15 de mayo de 2019.